La viñas, la uvas, su fruto el vino, emprendió un progreso tecnológico de gran avance que supuso una revolución del vino y comenzó en Hispania.
Los fenicios comercializaban vino por todo el Mediterráneo empleando ánforas, que por su fragilidad fueron sustituyéndose por pellejos.Uvas Tempranillo en Peñafiel, DO Ribera del Duero |
Esta
técnica fueron desarrollándola, dando nuevas formas a la madera y
utilizando mimbres como aro para resistir el empuje del líquido
interior.
Fue
el Emperador Julio Cesar en el año 51 A.C, en sus comentarios sobre
la guerras de la Galia donde figura una de las primeras referencias
más conocidas sobre estas barricas, de los Celtas en Hispania.
Los
Romanos adoptaron rápidamente estas barricas para el trasporte del
vino en las “bodegas” de los barcos como para el trasporte por
tierra junto con su manejo por la curvatura de la barrica, una sola
persona puede trasladarla haciéndola rodar.